Debido a su localización geográfica, la ciudad está estrechamente ligada al mar. Esta relación (a veces tormentosa) ha influido en la fisionomía urbana de la misma y por ende en su arquitectura.El caso de las torres miradores de Cádiz es un claro ejemplo de ello. Una joya, en ocasiones algo escondida, que aportan esa autenticidad a la arquitectura local.
Esto no quiere decir que sea la única ciudad con torres, que no lo es, ni con torres miradores. Lo que hace único el caso de Cádiz es la función de las mismas, el número de torres de la ciudad y como pasó a ser parte de la arquitectura urbana y el prestigio social que otorgaban.
Cádiz y el comercio marítimo
Para entender un poco mejor su origen, debemos remontarnos al siglo XVIII, el siglo de oro de Cádiz. Su puerto era uno de los más importantes a nivel nacional e internacional. Esto se debe a dos factores:
- El Tratado de Utrech en 1713 que potenció el comercio marítimo con América.
- La Real Orden de 12 de mayo de 1717, en la que Felipe V determina trasladar la Casa de Contratación a Cádiz.
El Puerto de Cádiz se convirtió en lugar de salida y entrada del comercio de Indias, motivo más que suficiente para que los comerciantes (principalmente genoveses) establecieran su residencia en la ciudad.
Primeras torres miradores
Aunque tras el asalto de 1596 desapareció gran parte de la trama urbana y la documentación, se conservan dibujos y grabados donde se puede constatar la existencia de torres miradores.
Durante el siglo XVII ya tenemos algún ejemplo en la ciudad, pero es en el siglo XVIII cuando comienzan a aparecer por doquier hasta alcanzar las 160.

Fuente: Hauser y Menet (1892) Biblioteca Digital Hispánica
Como resultado del aumento demográfico genera una trama urbana más densa y la aparición de nuevas tipologías de viviendas; contexto en el que aparecen estas torres. Dada la estrechez del trazado, aumenta el número de plantas que se construyen hasta 4 y aparecen las casas burguesas neoclásicas, caracterizadas por un patio central y la torre mirador como elemento funcional y de prestigio. A finales del XVIII se prohibió su construcción por el Ayuntamiento, alegando que las sobrecargas que producían podían ser un peligro.
Función y tipologías
La función que tenían estas torres era vigía. Desde aquí los comerciantes podían ver la llegada de los barcos que traían sus mercancías, y también los barcos de otros comerciantes. Cada torre tenía una bandera, para que los navíos supieran donde llevar la carga. Además se usaban como lugar de reunión, luminoso y resguardado del viento.
Su arquitectura servía también para demostrar la importancia de sus dueños. Por esta razón son un alarde de poder, cuanto más a la vista estuvieran a pie de calle mejor. Esto explica que cada construcción sea singular. Normalmente son de planta cuadrada, con uno o dos pisos de altura, realizadas con piedra o ladrillos para resistir al viento y siendo una continuación de los muros de carga de la propia edificación.
En muchos casos, la salida al exterior se realiza mediante el retranqueo de la última planta o con la construcción de una garita. Aunque cada torre tiene un estilo, podemos englobarlas en cuatro categorías:
- Terraza: con cubierta plana y cerrada por un pretil.
- Sillón: con una última planta de acceso retranqueada que ocupa aproximadamente la mitad de la misma.
- Garita: el acceso se remata con una garita, de planta poligonal y acabado en una cúpula. Ésta servía de vigía y estaba resguardada. Es la más común.
- Mixta: mezcla el estilo de garita con el de sillón.

Fuente: Torre Tavira (2017) Torres Miradores de Cádiz
La arquitectura doméstica
A grandes rasgos, podemos decir que estas torres se encuentran en las casas burguesas neoclásicas. Esta tipología surge de nueva planta o con una adaptación de la casa palacio barroca.
Las plantas se dividían por usos, siendo:
- Planta baja: Patio y almacenes. Normalmente en el subsuelo del mismo había un aljibe que recogía el agua de lluvia.
- Entresuelo: Comercios y oficinas. Aquí se realizaba la actividad mercantil.
- Primera planta o planta noble: Vivienda. Esta planta solía contar con techos más altos y zonas más luminosas. Aquí encontramos materiales como la caoba.
- Segunda planta: Servicio.
- Terraza: Ocio y trabajo (lavar y secar ropa). Servían como lugar de reunión.
- Torre mirador

Fuente: Torre Tavira (2017). Torres Miradores de Cádiz
La torres en la actualidad
Se tiene constancia de que en la época el número de torres miradores alcanzó las 160; hoy en día siguen en pie, en peores o mejores condiciones 133.
Actualmente son de propiedad privada exceptuando la Torre Tavira, que alberga una cámara oscura y de la que hablaremos posteriormente en otra entrada.

Fuente: Torre Tavira (2017) Torres Miradores de Cádiz
Otras han pasado a ser alojamiento hotelero, como es el caso de la Casa de las Cuatro Torres, de la que os recomendamos su cuenta en instagram.
Y aun sabiendo que dedicaremos otro post a contaros más cosas sobre estas torres, no podemos acabarlo sin hacer mención especial a la Bella Escondida. La única torre con planta octogonal y que debe su nombre a que no es vista desde la calle.
Aprovechad los paseos para alzar la vista, es sorprendente la de torres que encontraréis y que quizás nunca habías visto.
Rocío J.
Estupendo post y magnífica información, a la par que muy entretenida. Nuestras Torres son «mu nuestras» y se agradece que lo recordéis, al gaditano y futuro visitante.
thisiscadiz
¡Muchas gracias Rocío! nos encanta aportar nuestro granito de arena.
Ezequiel Robles
¡Qué bueno conocer más sobre las torres miradores! Me ha gustado mucho el post.
Es algo que siempre me ha llamado la atención cuando he visitado Cádiz.
¡Saludos!
thisiscadiz
Muchas gracias Ezequiel, ¡encantados de que te haya gustado!